jueves, julio 23, 2009

velada

Colores de los arboles marchitos
martilla la hojuela del limón dulce
que la noche no está para rimas
ni la cama está para dormir
Remueve el sin sabor de los labios rojos
que tiritan renaciendo a cada partir
Invoca la nueva noche
para salir a socorrer aquel barniz
llama al sueño que recoja estos ojos
que no hacen más que sucumbir
que no deja morir en paz una olvidada madrugada
que acaba de a poco partir.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mucha rima, mucha rima....

Anónimo dijo...

sola. estás sola, y tu caballero? no sirve si no está.